Esta semana se dió a conocer que la tercera boleta de excarcelación de Abdala Makled fue librada por el tribunal de ejecución que conoce la causa junto con las respectivas boletas de LIBERTAD PLENA por cumplimiento de pena para sus hermanos Basel y Alex Makled.
En este sentido, el señor Najem Makled, de 86 años de edad, y padre de los hermanos, publicó un vídeo donde solicita la liberación de sus hijos, a quienes «espera ver en libertad antes de morir».
El adulto mayor, visiblemente conmovido, solicita al presidente Maduro, lo mismo que el resto de sus familiares han solicitado numerosas veces a lo largo de este año y medio: el cumplimiento de la ley y el respeto a la decisión emanada del tribunal.
Recordemos que el ciudadano Abdala Makled fue condenado por el delito de Ocultamiento de arma de fuego en 2008 y debía cumplir una pena de 6 años y 6 meses. A día de hoy, Abdala ha pagado 12 años de prisión y pese a haber publicado el 19 de Octubre, un vídeo donde él mismo denuncia su irregular situación, continua preso en la sede del Sebin del Helicoide.
El 27 de Octubre, a pocos días de la publicación del vídeo del Señor Abdala, vídeo en el que se le puede apreciar en franco estado de deterioro físico, el Fiscal General de la República fue increpado en una entrevista con Ernesto Villegas al respecto, llegando incluso este a recordar que «todo ciudadano con boleta de excarcelación debe ser liberado de forma inmediata»; lo que ciertamente no ha ocurrido en el caso de Abdala Makled hasta hoy.
«Los funcionarios del Sebin no recuerdan que cada uno de ellos al tener conocimiento de la existencia de la boleta de mi hermano, cosa que es pública y notoria, incurren en el delito de PRIVACIÓN ILEGÍTIMA DE LIBERTAD, y que este es un DELITO DE LESA HUMANIDAD penado con hasta veintisiete años de cárcel en Venezuela» Declara la hermana de los detenidos para la redacción de El Candelazo. «En Venezuela no existe la condena a cadena perpetúa, ellos pagaron más de lo previsto en su condena, ¿por qué se niegan a liberarlos? Los delitos de Lesa humanidad no prescriben y los derechos humanos son para todos, no podemos permitir más injusticias. Nosotros solo queremos dejar atrás esta pesadilla», dice Samra Makled.
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