Hussein Ahmad Karaki, que habría operado en la región con documentos de Brasil, Colombia y Venezuela, «fue el que compró y preparó la camioneta que explotó en la Embajada de Israel» en Argentina» en 1992, dijo la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. Reveló que la información anunciada este viernes es el resultado de una investigación conjunta con otros países del área.
El gobierno de Argentina señaló este viernes a Hussein Ahmad Karaki como jefe operativo del grupo chií libanés Hezbolá en América Latina, y pidió su captura internacional. Afirmó que fue él quien compró el carro bomba utilizado para el atentado a la Embajada de Israel en Buenos Aires en 1992.
En rueda de prensa, la ministra de Seguridad argentina, Patricia Bullrich, describió a Karaki como «el cerebro y reclutador de Hezbolá en América Latina». Destacó que «fue el que compró y preparó la camioneta que explotó en la Embajada de Israel» en Argentina, un ataque que se saldó con la muerte de 29 personas.
Bullrich aseguró que Karaki, que habría operado en la región con documentos de Brasil, Colombia y Venezuela, se encuentra en Líbano, donde nació. Reveló que la información anunciada este viernes es el resultado de una investigación conjunta con otros países de la región.
«Queremos que se sepa quién es Karaki, queremos que el pueblo argentino sepa que Karaki estuvo atrás de los atentados a la embajada, que fue el que compró el coche bomba, y que fue el jefe operacional, en línea directa con (Hasan) Nasralá, que fue muerto hace unas semanas en el Líbano, y que recibió la orden directa para el ataque luego también a la AMIA», agregó la ministra al vincular también a Karaki al atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en 1994, en el que murieron 85 personas.
Argentina pide su captura
Si bien Bullrich no aportó más información sobre el papel del presunto jefe operativo de Hezbolá en la región en aquel segundo ataque, un informe del servicio de inteligencia israelí Mosad ubicó a Karaki como el presunto comandante de esa operación.
En ese informe, ampliamente difundido por la prensa argentina e internacional en 2022, el Mosad ya había apuntado a Karaki como el encargado de comprar la camioneta Ford F-100 utilizada para el ataque contra la Embajada de Israel.
Hezbolá, aliado de Irán, ha sido apuntado por diversas investigaciones como responsable de los atentados contra la Embajada de Israel y la AMIA. Ambas causas siguen abiertas en la justicia argentina, la cual mantiene órdenes de captura contra exfuncionarios iraníes por el ataque a la mutualista judía.
Bullrich señaló que Karaki estuvo detrás de una serie de intentos de ataque en Latinoamérica en los últimos años, incluido uno en Colombia en 2021 y otro en Bolivia contra empresarios israelíes mediante el uso de un carro bomba.
Indicó que el más reciente intento de ataque en el que estuvo involucrado tuvo lugar en Perú en marzo de este año y añadió que la Policía Federal de Brasil, en colaboración con Argentina, frustró en 2023 una operación contra instalaciones de la comunidad judía y una segunda contra un empresario.
Hussein Ahmad Karaki es la identidad del jefe operativo de Hezbolá en Latinoamérica, según dio a conocer el Gobierno argentino. Es acusado de operaciones de reclutamiento y planificación de acciones terroristas como los atentados a la AMIA y la Embajada de Israel en Buenos Aires.… pic.twitter.com/JNPyM0oUF6
— CAM en Español (@CAMenEspanol) October 25, 2024