La institución financiera abrió una sucursal durante el gobierno del fallecido presidente Hugo Chávez, pero tras irregularidades descubiertas en su casa matriz (Portugal), llevaron a las autoridades de esa nación a obligar a separar los activos tóxicos de la entidad. Así, la parte saneada pasó a llamarse Novo Banco desde en agosto de 2014. El 20 de octubre de 2010 fue autorizado para iniciar operaciones en Venezuela como Banco Espirito Santo.
El 31 de marzo de 2017 Novo Banco fue vendido por el gobierno portugués al fondo estadounidense Lone Star, que en mayo del año pasado vendió su filial venezolana a Bancamiga, ahora banco universal, reseñó Tal Cual.
La aprobación de la negociación quedaba pendiente de parte de las autoridades. Novo Banco solicitó en febrero de este año la revocatoria de funcionamiento en el país y el respectivo informe fue presentado al órgano financiero nacional en el mes de julio.
La decisión favorable fue tomada por la autoridad el 10 de septiembre y la revocatoria de funcionamiento está publicada en la Gaceta Oficial 41.521 del 9 de noviembre que circuló este viernes 16 de noviembre.