La orden de detención dictada por la Corte Penal Internacional (CPI) contra el presidente ruso, Vladímir Putin, es señal del «colapso final» del sistema del derecho internacional, según declaró el expresidente ruso Dmitri Medvédev.
«Las consecuencias para el derecho internacional serán monstruosas. Al fin y al cabo, se trata del colapso de los fundamentos, de los principios del derecho. Incluidos los postulados sobre la inevitabilidad de la responsabilidad. Ahora, nadie acudirá a ningún organismo internacional, todos [los países] se pondrán de acuerdo entre sí», dijo Medvédev, que actualmente ocupa la vicepresidencia del Consejo de Seguridad de Rusia, en una publicación en las redes sociales este lunes.
El exmandatario también advierte que se ha producido el «colapso final» del sistema del derecho internacional, señalando que su principal defecto es «su ineficacia», ya que los países no están dispuestos a seguir «los actos sesgados» de la Asamblea General de la ONU, vetan las decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU y abandonan las distintas instituciones de la organización.
Medvédev afirmó que la instrucción a la CPI de «juzgar al presidente de otra potencia nuclear» procedió de Washington y añadió que no tiene «ningún valor práctico».
El Comité de Investigación de Rusia abrió este lunes una causa penal contra el fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) Karim Ahmad Khan y los jueces Tomoko Akane, Rosario Salvatore Aitala y Sergio Gerardo Ugalde Godínez, que la semana pasada emitieron una orden de detención contra Putin, citando su responsabilidad por presuntos crímenes de guerra cometidos en Ucrania.
De acuerdo con el comunicado oficial del organismo, sobre la base de la solicitud con la orden de arresto contra ciudadanos rusos presentada por el fiscal, los jueces de la CPI «dictaron ilegalmente órdenes de detención» contra el presidente ruso y la comisionada presidencial para los Derechos del Niño en Rusia, María Lvova-Belova.
La CPI fue constituida en 2002 para investigar graves violaciones de los Convenios de Ginebra y llevar ante la justicia a los responsables de crímenes de guerra, crímenes de lesa humanidad y genocidio.