El gobierno de Donald Trump anunció recientemente un arancel de 25% para los países que adquieran petróleo y gas venezolano, además de la revocación de licencias  que permitían a empresas operar en el sector energético del país sudamericano. Entre las medidas, se incluyó la suspensión de una autorización fundamental para la petrolera estadounidense Chevron.

Las restricciones provocaron que compradores habituales de crudo venezolano en China e India detuvieran algunos cargamentos programados para finales de marzo y abril.

En total, 42 buques partieron de Venezuela el mes pasado transportando un promedio diario de 804.677 barriles de petróleo y 341.000 toneladas métricas de productos derivados, indicó Reuters. Las cifras que representan una reducción de 7,8% en comparación con marzo de 2024.

Según la agencia: «Dos barcos han salido de aguas venezolanas sin cargar desde febrero, mientras la presión de Trump sobre el país sudamericano ha aumentado y Washington acusó a la administración de Maduro de no hacer lo suficiente para frenar la migración ilegal a Estados Unidos».

Agregó que otros barcos pasaron semanas cerca de puertos venezolanos, mientras muchos clientes y propietarios de petroleros esperan la aplicación de los aranceles por parte de la administración estadounidense.