Caracas, 17 de febrero.- Los venezolanos siguen llegando a la frontera con Colombia para cruzar a la nación vecina y así poder adquirir alimentos y medicinas o continuar su camino hacia otros países.
Según reseñó el diario El Nacional, datos ofrecidos por autoridades colombianas, 183 venezolanos han sido devueltos al país desde el jueves de la semana pasada.
José Rozo, expresidente de Fedecamaras Táchira, señaló que “expulsar a esa gente de bajos recursos, que viven con precariedades en Venezuela, es condenarlos a muerte. Ellos se van buscando pan, abrigo y refugio“.
Destacó que “la gente se está yendo para allá no porque quiera, sino porque quieren vivir y comer” y agregó que el Premio Nobel de la Paz “debe reflexionar: Expulsar a esos venezolanos pobres es condenarlos a la muerte“.
Sostuvo que el éxodo venezolano lleva tres momentos migratorios importantes: “Un primero éxodo fue el de la pequeña y mediana industria que se fue a Colombia y fue recibida a manos llenas por el vecino país que recibió 10.000 millones de dólares de inversiones de venezolanos. En el segundo éxodo, fue la clase media preparada: profesores, ingenieros, médicos, con títulos, fueron recibidos con beneplácito. Ahora el tercer oleaje es de la pobreza, hombres y mujeres que están llegando a Cúcuta con una mano adelante y otra atrás porque no tienen cómo costear su permanencia y deben dormir en las calles y eso ‘le huele a feo’ al premio Nobel de la Paz”.
“Ahora que tenemos un vecinos que se ha beneficiado toda la vida de la bonanza petrolera, son los primeros en salir a hacer redadas para sacar a los venezolanos que están en Cúcuta y generan medidas como el alcalde de Cúcuta, César Rojas, con la emisión de un decreto que prohíbe que se le de comida a los venezolanos que andan por las calles. Es algo inconcebible”, fustigó.