Toda la tragedia que hoy vivimos los venezolanos, radica de manera fundamental en la corrupción y en la impunidad al respecto por parte de los órganos que deberían impartir una justicia imparcial en el país. Este cáncer presente en todas las instituciones del Estado, ha hecho metástasis generando miseria, hambre, una hiperinflación, y una cantidad de padecimientos que incluyen la muerte de miles de pacientes por no tener los medicamentos ni tratamientos requeridos para sus enfermedades.

Mi lucha como diputado a la Asamblea Nacional siempre ha sido precisamente en contra de la corrupción, y he soportado cada una de mis denuncias tanto en la Fiscalía General de la República, en el Poder Moral y en instancias internacionales, con pruebas y argumentos para que sean investigadas y para que haya justicia. Sin embargo, en Venezuela los causantes de este flagelo, liderado por grandes jefes del gobierno, unos huyendo y otros que todavía permanecen en el país de manera campante, y lo peor es que continúan en las instancias de poder, a pesar de ser los responsables del saqueo y del robo de más de 300 Mil Millones de Dólares.

Todos recordarán que el propio Héctor Navarro el año pasado denunció en la Comisión de Contraloría de la Asamblea Nacional, justamente cuando yo era vicepresidente de la misma, que el desfalco que se le ha hecho a la nación ronda por un monto de 300 Mil Millones de Dólares.

Nada más en uno de los casos más grave de corrupción como es el de PDVSA, se robaron más de 11 Mil Millones de Dólares, de lo cual se acusa directamente a Rafael Ramírez en su calidad de presidente de la empresa más importante del país. Por cierto, a pesar de las denuncias y las pruebas existentes, el Fiscal General de la República ha hecho caso omiso a este desfalco y no ha dicho ni pío al respecto. No obstante, el caso de la corrupción en la importación de alimentos y medicinas, el país hoy está muriendo de hambre producto de este pillaje y todavía no hay un solo presos por los 176 millones de kilos de comida que se perdieron y que enterraron podrida. Tampoco hay un solo responsable ni sancionado por el saqueo de más de 27 Mil Millones de Dólares, que eran para importar alimentos y medicinas durante los años 2013 y 2015. Marco Torres que es el gran responsable de esta crisis alimentaria, y nunca aparecieron ni el dinero ni la comida, y mucho menos rindió cuentas de este desfalco, a pesar de que se aprobó un voto de censura contra su corrupta gestión. Y el gobierno de manera cínica y cómplice lo premió manteniéndolo en el cargo de ministro de Alimentación, y posteriormente,  mandándolo como candidato a la gobernación de Aragua, donde por cierto, también se robó los votos de los electores aragüeños que votaron por un cambio y por que cese la hambrazón en la entidad.

Hoy es imperante en Venezuela hacerle un juicio a la corrupción, hay que responsabilizar y enjuiciar a los protagonistas de este desfalco al patrimonio nacional,  y las instancias de justicia, tienen que darle la cara al pueblo, porque es un tema prioritario para los venezolanos, porque el país está paralizado y muerto de hambre, mientras que los corruptos están obesos y sus cuentas bien gordas en el exterior y con el amparo de un gobierno hampón e ineficiente.

Vía LaPatilla.com

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