Chassan Naem Chatay llevaba más de 10 años en Bogotá. Autoridades indagan si es parte de célula terrorista
Argentina se declaró en máxima alerta terrorista, luego de revelar que había capturado a tres ciudadanos sirios y a un libanés que estarían planeando un atentado en su territorio.
Patricia Bullrich, excandidata a la Presidencia y ahora ministra de Seguridad del presidente Javier Milei, se encargó de revelar que los extranjeros buscaban armar una célula terrorista y reclutar milicianos.
Movimiento migratorio
Y aunque los datos de la investigación están bajo reserva, en Buenos Aires se filtró información según la cual uno de los capturados, de origen sirio-libanés, aparece en el listado de sospechosos del FBI y de la CIA.
Ese sirio fue el que llegó al aeropuerto de Ezeiza y a partir de sus comunicaciones y nexos fueron capturadas otras tres personas que ingresaron a ese país en diferentes fechas. Sin embargo, tenían en común reservas en el mismo pequeño hotel ubicado a cuatro cuadras de la embajada de Israel, en el centro de Buenos Aires.
El nerviosismo en Argentina aumentó después de que Milei se alineó con Israel luego de que estalló la guerra en la Franja de Gaza. Además, el país suramericano ya fue escenario de un atentado contra la comunidad judía (la bomba al centro Asociación Mutual Israelita Argentina, Amia, en 1994); y hoy es sede de los llamados juegos Macabeos Panamericanos, en los que participan atletas israelitas.
La ministra de Seguridad no ha querido entregar mayor información sobre las capturas e identidades de los supuestos terroristas. Incluso, al centro de enlace Migratorio en Colombia hicieron saber que el tema se maneja al más alto nivel. Pero Bullrich soltó un dato que terminó revelando que el sirio capturado con pasaporte colombiano y venezolano es la piedra angular de la investigación.
Según señaló, uno de los detenidos ya había viajado a Argentina portando otro pasaporte. El dato que soltó la funcionaria encaja con la investigación periodística que El Tiempo ha adelantado.
La Cancillería colombiana terminó revelando que el capturado que portaba el pasaporte vino tinto (expedido en Bogotá) es Chassan Naem Chatay, quien tramitó la ciudadanía colombiana por adopción. Y uno de los amigos del sirio, de 68 años, le dijo a El Tiempo que este ya había estado en Argentina hace seis meses, dato que encaja con la información de Bullrich.
“Yo le he ayudado en muchos trámites a Chassan para el tema de alojamiento en Argentina, porque él también hace 6 meses viajó a ese país a un torneo de tenis de mesa. Para ese viaje yo le busqué el club al que él tenía que llegar. Él viajaba a visitar a amigos y para entrenar en un club de tenis de mesa y de ahí iba a Chile a participar en un torneo de veteranos, pero lo cancelaron”, dijo Andrés Bedoya, tatuador que tiene un local en el mismo centro comercial en donde el sirio capturado vendía perfumes.
Bedoya agregó que hace seis meses Chassan le dijo que quería la nacionalidad argentina, aunque ya tenía la colombiana y venezolana.
Propiedades en Bogotá el presunto terrorista
Este diario estableció que el señalado terrorista es dueño de un pequeño local en el centro de Bogotá, en donde vende perfumes que trae de Panamá.
Se llama Comercializadora Chatay y, según algunos vecinos del lugar, el sirio llegaba en bicicleta al local y abría su perfumería con alguna periodicidad. Pero EL Tiempo estableció que según sus movimientos migratorios, salía de Colombia con frecuencia.
Hace nueve meses dijo que iba hacia Alemania a visitar a amigos. Y a otros comerciantes les mostraba videos participando en eventos como miembro de las ligas de tenis de mesa de Siria y de Venezuela.
Incluso, dijeron que estuvo en un evento organizado por la alcaldía de la Candelaría y que entrenaba en el Club Beer Pong. Allí informaron que no era empleado, sino cliente que pagaba por el uso de las mesas para entrenar gente.
El Tiempo estableció que el local en donde funciona su perfumería le pertenece, así como el apartamento donde vive ubicado en la calle 19 con carrera 4.ª. También le figura la oficina 404 de un edificio ubicado en la calle 19, con carrera 8.ª, a tan solo 8 cuadras de la Casa de Nariño.
‘Nadie lo ha preguntado’
A pesar de ser un caso en el que estarían participando agencias de inteligencia de tres países, solo El Tiempo ha ido hasta su local y ha indagado por el sirio entre sus allegados. Algunas personas que trabajan en el centro comercial dijeron que la última vez que lo vieron fue el viernes 29 de diciembre y que ninguna autoridad ha ido a preguntar por Chassan, quien aparentemente vive solo en Bogotá.
“A las agencias de inteligencias de Estados Unidos no solo les preocupa que sirios, libaneses e iraníes estén obteniendo ciudadanía colombiana para ejecutar posibles atentados. También les preocupa que se puedan mover con facilidad por América Latina y financiar a células terroristas con supuestas actividades lícitas, como está pasando con cadenas de supermercados, exportadoras de carne y hasta carboneras”, dijo un oficial de inteligencia.
Se espera que en los próximos días se entregue información sobre el posible atentado o se señale que se trata de una falsa alarma, como creen amigos del sirio.