La Comisión Interamericana de Derechos Humanos condenó este lunes las declaraciones del ministro del Interior, Diosdado Cabello, quien acusó a organizaciones no gubernamentales de estar vinculadas a una supuesta estructura terrorista que según el gobierno tenía como objetivo sabotear las elecciones del 25 de mayo en Venezuela.

A través de un comunicado difundido en redes sociales, la CIDH calificó de estigmatizantes las acusaciones y denunció que estas ocurren en un contexto de persecución y criminalización contra voces críticas, incluidos periodistas, activistas de derechos humanos y miembros de la oposición política.

Las declaraciones de Cabello generaron alarma. En rueda de prensa, el también vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela vinculó el 28 de mayo a las ONG Provea, Foro Penal, Médicos Unidos de Venezuela y Maracaibo Posible con un supuesto plan para atacar residencias diplomáticas, instalaciones públicas y centros electorales.

Se basó -según afirmó- en información obtenida de los teléfonos móviles incautados al exdiputado opositor Juan Pablo Guanipa, detenido días antes.

 

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