El coronavirus no está controlado en Venezuela. Esa es la sensación que tienen las personas en las calles y es que, aunque el Gobierno diga que los brotes y picos del COVID-19 se han producido en sitios puntuales, el sentir de las personas es que hay una subcifra de la que no se habla.
José Félix Oletta, exministro de Salud en Venezuela, decía en días pasados que no confiaba en los datos que entregaba el Ejecutivo nacional, pues se estaban aplicando una serie de pruebas rápidas que tienen una sensibilidad del 60%. Decía el especialista que podíamos estar en presencia de falsos negativos lo que significa que el número de infectados que hay en el país es mucho más alto del que reflejan las estadísticas gubernamentales.
“Es necesario que salgan a aclarar las dudas porque hay un miedo generalizado en toda Venezuela”, recordaba el médico cirujano e internista que fungió como autoridad máxima de salud entre 1997 y 1999.
Oletta no es el único que ha cuestionado los datos del Gobierno nacional, pues la diputada María Teresa Pérez, exdirectora de Salud en el estado Lara, ha denunciado en reiteradas ocasiones el silencio epidemiológico que hay en el país. “No se entregan cifras de ningún tipo y eso es algo muy delicado”, dice.
Los médicos piden al Gobierno nacional que entregue los boletines epidemiológicos, pues desde el 2016 los medios de comunicación son los únicos que hablan de enfermedades en el país.
Sólo habla el Gobierno
En medio de la pandemia los médicos no tienen voz. Desde que el pasado 13 de marzo el Gobierno nacional anunciara los primeros dos casos de coronavirus en el país han sido los voceros de Miraflores los encargados de difundir información al país algo que llama profundamente la atención pues, en la gran mayoría de países del mundo, el Ministro de Salud es quien se encarga de dar un parte diario.
Ruy Medina, exdirector sectorial de Salud en el estado Lara, denuncia la postura silente del ministro y pide un mayor compromiso, pues debe ser gente capacitada la que salga a dar la información. “Los políticos saben de política y los médicos de medicina. Tiene que ser el ministro de Salud o el director de epidemiología los que hablen de lo que está pasando. Es necesario que la gente que salga sepa lo que está diciendo”, puntualiza el doctor.
Por Osman Rojas | LA PRENSA de Lara