En horas de la noche de este jueves, día en el que se juramentó el presidente Nicolás Maduro para cumplir su segundo mandato en el período 2019-2025, la urbanización Sucre, ubicada en la ciudad de Barquisimeto, estado Lara, fue objeto de una arremetida por parte de funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES).
Alrededor de las 8:00 de la noche, las FAES entraron a las instalaciones de dicha urbanización de manera forzada, provocando daños en diferentes rejas y puertas del bloque 22 y 23. Tales destrozos lo sufrió con mayor intensidad un apartamento situado en el cuarto piso del bloque 22, según refiere el medio regional El Impulso.
El exalcalde del municipio Irribarren de Lara, Alfredo Ramos, también denunció el hecho a través de su cuenta en Twitter, red en la que aseguró que los funcionarios ingresaron al complejo con pasamontañas y sin orden judicial para llevar a cabo dicho procedimiento.
“Urgente: Me informan a esta hora el FAES con pasamontañas está allanando las residencias de la urbanización Sucre reprimiendo a la comunidad entrando a los hogares sin orden judicial. Hoy el Usurpador Maduro nuevamente muestra su rostro fascista”, escribió Ramos.
Urgente: Me informan a esta hora el FAES con pasamontañas está allanando las residencias de la urbanización Sucre reprimiendo a la comunidad entrando a los hogares sin orden judicial. Hoy el Usurpador Maduro nuevamente muestra su rostro fascista
— Alfredo Ramos (@AlfredoARamos) January 11, 2019
De igual manera, El Impulso precisó que una hora después los residentes fueron víctimas de otra arremetida de uniformados de las FAES, quienes comenzaron a reprimir con gases lacrimógenos y disparos que fueron accionados con el fin de dispensar y crear temor entre los vecinos que se encontraban reunidos desarrollando un “cacerolazo”.
Cabe destacar que entre las declaraciones que ofrecieron algunos residentes, quienes se abstuvieron de dar sus nombres para evitar alguna clase de represalias, afirmaron que los funcionarios golpearon, amenazaron y maltrataron físicamente, como verbalmente a algunos habitantes de la urbanización. Incluso resaltaron que algunos vecinos fueron apuntados de forma directa.
Además, agregaron que tras lo sucedido, las FAES retuvieron a una mujer, a quien pusieron gasolina para implicar y justiciar su detención.
