El expreso político Lorent Saleh ofreció una rueda de prensa este martes, desde España, donde explicó sus vivencias durante su detención en las sedes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) de Plaza Venezuela y El Helicoide, en Caracas, donde afirmó que fue golpeado y torturado por los funcionarios de este cuerpo de seguridad.
“Las torturas en mi país son para obligarte a admitir algo que no es cierto, por eso te golpean, te amarra, te aplastan, te asfixian, se burlan e intentan hacerte sentir como lo más inferior que hay“, señaló Saleh.
El activista detalló el horror que vivían los detenidos del Sebin de Plaza Venezuela, “La Tumba”, al escuchar las llaves que abrían las rejas, porque serían golpeados. “Nos decían, ‘sí quieres que esto se acabe habla’”, destacó el joven, quien puntualizó además que antes de trasladarlo a El Helicoide lo golpearon brutalmente.
Asimismo, Saleh destacó que a su llegada a El Helicoide se sorprendió al ver cómo “colgaban a personas de las rejas durante todo el día y nadie hacía nada, golpeaban a las personas durante toda la mañana y nadie decía nada. Los problemas que tuve con los funcionarios fue por eso, por meterme en el medio ante esta situación. Mi condición como defensor de derechos humanos me impedía quedarme callado (…) No podía dormir tranquilo sabiendo que habían menores de edad ahí detenidos. Estar ahí es estar con animales, en espacios contaminados, sin luz, sin comida, sin agua.“
En cuanto a su incomunicación, Lorent afirmó que siempre estuvo confinado a una celda, por lo que se ingenió modos para estar comunicado. “Los presos buscamos la manera, así sea un papelito, dos vasos atados por una cuerda o un vaso con una cuerda donde metes cosas para pasarlas”, detalló.
Por otra parte el merecedor del premio Sájarov destcó que ha evolucionado como ser humano. “No soy el mismo Lorent, el tiempo pasa y no pasa en vano, aprendí a valorar cosas pequeñas como los colores, el tiempo, la libertad, todo aquello que me quitaron cuando estaba preso. Aprendí el valor de una hoja y un lápiz y de lo terrible que se siente cuando ya se gasta (…) Además aprendí a valorar el silencio, eso lo aprendí cuando pude ver como alguien puede golpear y reírse, y como alguien puede estar sangrando y en paz“, puntualizó.
Juan Requesens
En cuanto al encarcelamiento del diputado Juan Requesens, Saleh destacó que se enteró cuando lo trasladaron a El Helicoide y buscó la manera de acercarse a él, pudo darle un abrazo y salió muy preocupado de la situación en la que dejaba al parlamentario.
“Juan estaba en una celda al lado del gimnasio con su colchón y unos libros, yo pedí que me cortaran el cabello como una excusa para acercarme a él, estando ahí eché una lloradita para que me dejaran acercarme y cuando lo pude abrazar vencimos el frío de los barrotes“, narró el joven.