En recorrido por el mercado de Corito, en Maracaibo, Juan Pablo Guanipa constató que al menos un setenta y cinco por ciento de los locales permanecen cerrados. Hambre, desabastecimiento y escasez, se evidencian en los principales mercados públicos del estado. Un recorrido por el mercado de Corito, parroquia Cristo de Aranza de Maracaibo, demuestra la “calamidad” que está viviendo la ciudadanía, que además de verse agobiada por la hiperinflación, enfrenta la desaparición de los productos en los anaqueles.
“Aquí sufre el pueblo que llega a comprar y no consigue nada, o lo que consigue con lo que tiene no le alcanza y sufre el comerciante que tiene que cerrar su negocio porque no tiene cómo mantenerlo” aseguró Juan Pablo Guanipa, gobernador electo del Zulia, luego de conversar con algunos de los comerciantes que – a pesar de los inconvenientes – intentan mantener sus puertas abiertas. Indicó que luego de caminar por los pasillos del mercado, logró constatar que al menos un setenta y cinco por ciento de los locales se encuentran cerrados.
Fustigó que se pretenda manipular mediante términos como “precios acordados” cuando es conocido que son imposiciones estatales, que perjudican el mercado. “El sector privado que tiene que producir carne, queso, huevo, plátano, que servía de despensa para el país no está produciendo. Ellos imponen precios sin saber que hay una cadena de producción, que hay un costo de producción y que el mercado hace que se defina cuál es el costo del producto” aseguró.
“Muchas ganas, mucha voluntad tiene la gente que, en medio de esta calamidad, sigue echándole pierna” señaló. A su juicio, el propósito de Nicolás Maduro es doblegar definitivamente, a quienes contra todo pronóstico siguen apostándole a Venezuela. “Vemos carnicerías abiertas sin nada que ofrecer. Vemos pobreza extrema. Los pocos comercios que abren, lo hacen con muchísimo temor y los considero héroes, porque intentan sobreponerse a esta desgracia, pero a Maduro eso no le importa, solo quiere seguir empujándonos al abismo”.
Generar el quiebre
Ante la realidad que aqueja a todos los venezolanos, afectados no solo por el desabastecimiento y la escasez sino por las precarias condiciones de servicios públicos, urge según Guanipa, asumir “con conciencia” que resulta inminente ejercer mecanismos de presión para generar el quiebre definitivo de Nicolás Maduro y el sistema que representa.
“Hay problemas graves con el agua y con el servicio eléctrico. Si no hay electricidad, no hay bombeo. La gente nos dice cuán complicado se hace la cotidianidad. No hay un solo servicio que hayan mejorado, por el contrario, solo los han empeorado. La gente clama por un poco de agua, de electricidad, que deberían proveer y con nada de eso se cuenta”.
“En mi comunidad tenemos en promedio, en 40 horas más de 20 horas sin luz. ¿Y qué están haciendo? Absolutamente nada. Siempre que pasa algo dicen que es un saboteo, que es gente externa. No asumen su responsabilidad. Nosotros si debemos asumir la nuestra y forjar ese cambio político que necesita el país” finalizó.
VÍA DIARIO LA VERDAD.