Las extracciones de petróleo en Venezuela cayeron en enero 2,8% en comparación con el mes anterior. Se situaron en 1,6 millones de barriles diarios, según datos de fuentes secundarias recogidas en el informe sobre la situación del mercado del crudo, publicado hoy por la OPEP.
De acuerdo con esos cálculos, usados por el grupo para controlar la producción de sus miembros, el bombeo de Venezuela cayó en 47.000 barriles diarios, la mayor bajada en todos los 14 socios de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Los datos oficiales comunicados por el gobierno contradicen los mencionados en el reporte internacional, indican que en enero la producción subió 9%, hasta los 1,7 mbd.
En cualquier caso, la producción de crudo en Venezuela está en sus niveles más bajos desde hace 28 años, con la excepción de la radical caída de extracciones experimentada durante varios meses en 2002 y 2003, cuando una huelga en la petrolera estatal, Pdvsa, hundió el bombeo por debajo de los 100.000 barriles diarios.
Las fuentes secundarias, actualizados en el nuevo informe de la OPEP, señalan que Venezuela extrajo en 2017 una media diaria de 1,9 millones de barriles, 11% menos que el promedio de 2016.
La grave crisis económica de Venezuela se ha dejado sentir también en Pdvsa, afectada por sanciones de Estados Unidos, que restringen su financiación.
La Administración de Donald Trump impuso sanciones financieras en agosto en contra del gobierno venezolano y Pdvsa, con las que prohibía a empresas estadounidenses negociar con deuda nueva emitida por el Estado venezolano y su petrolera estatal.
Pdvsa ha sido declarada en “default” o en suspensión de pagos por varias agencias financieras internacionales, al retrasarse en el pago de los vencimientos de varios de sus bonos.