En Venezuela, debido a los altos costos, es una tarea titánica comprar comida, medicinas, darse un gusto o salir a pasear con la familia. Como si no fuera suficiente, si una mujer quiere dar a luz en una clínica privada también se añadió a la lista de “casi imposible”.
Parir en un hospital de la red pública significa tener una “palanca” o conocido que trabaje en dicho centro; de lo contrario, son pocos los casos referidos que han logrado ser atendidos sin mayores exigencias, reseñó La Verdad de Vargas. El hospital José María Vargas y el hospital Materno Infantil de Macuto son las únicas opciones que tienen las parturientas del estado, y ambos colapsan atendiendo embarazadas del interior del país.
En una clínica privada, una cesárea puede costar entre 4.5 y 6.5 millones de bolívares. En algunos centros los honorarios médicos no están incluidos. También hay que tomar en cuenta que la madre o el recién nacido pueden complicarse, lo que puede requerir costosos cuidados intensivos.
Aunque la mayoría de las parturientas cuentan con una póliza de Hospitalización, Cirugía y Maternidad, las pólizas de los trabajadores del Gobierno no cubren este tipo de intervenciones.
Vía LaVerdadevargas.com