El nuevo gobierno peruano ejecutó el decreto en todo el país por 30 días para contener las «violentas manifestaciones» que exigen elecciones generales y la liberación del destituido expresidente Pedro Castillo.
«Se ha acordado declarar en estado de emergencia a todo el país debido a los hechos vandálicos y violentos, a toma de carreteras y caminos (…), que están siendo controlados por la Policía nacional y las Fuerzas Armadas», indicó el ministro de Defensa, Alberto Otárola.
Más temprano, el propio funcionario había declarado en emergencia la Red Vial Nacional para poder garantizar el tránsito libre de los peruanos y a la vez ejercer de manera adecuada los derechos constitucionales.
“Hemos dispuesto la inmediata protección de las Fuerzas Armadas de los puntos estratégicos y activos nacionales”, explicó Otárola.
Al tiempo, el responsable de la cartera gubernamental señaló que Ica y Arequipaque son los departamentos en los que más se han presentado disturbios y enfrentamientos entre manifestantes y las Fuerzas de Orden Público.
“Los peruanos necesitan trabajar, necesitan desplazarse, sobre todo en algunas provincias del sur del país. Necesitan llegar a su empleo, las empresas necesitan desplazar sus productos para facilitar la alimentación de todos”, agregó el ministro peruano.
Respecto al exjefe de Estado peruano, el Poder Judicial anunció mediante su cuenta de Twitter que se suspendió la audiencia programada para este 14 de diciembre en la que se iba a responder un pedido de prisión preventiva contra Castillo.
Fuente: NTN24