Las exportaciones de petróleo de Rusia a los EEUU están creciendo rápidamente a medida que el proveedor aprovecha las entregas perdidas de Venezuela y los recortes de suministros de los miembros de la OPEP.

En la primera mitad de mayo, 13 barcos de Rusia entregaron casi 5 millones de barriles de productos de crudo y petróleo, según un informe del socio gerente de Caracas Capital Markets, Russ Dallen. Hay más suministros en camino, con refinerías estadounidenses que triplicarán su consumo mensual de crudo ruso, el mayor productor extranjero fuera de la OPEP. “Últimamente, los envíos rusos que llegan a los Estados Unidos parecen estar en esteroides”.

Hasta febrero, los compradores estadounidenses recibieron más de 16 millones de barriles de crudo y productos, en comparación con los 20 millones del mismo período del año pasado. Para todo el año 2018, los envíos fueron de aproximadamente 137 millones, según datos de la EIA.

Venezuela, que se encuentra en la cima de más petróleo que Arabia Saudita, se ha quedado atrás de otros tres países latinoamericanos debido a que años de mala administración y falta de inversiones cobran su precio.

El miembro fundador de la OPEP produjo 740,000 barriles por día en marzo, mientras que las reservas de petróleo de Colombia son menos del 1% de las de Venezuela, produjeron 884,815 barriles. Venezuela tiene reservas de petróleo de 302.3 mil millones de barriles, mientras que el país latinoamericano vecino tiene volúmenes casi tan grandes como los de Gabón, con 1.96 mil millones de barriles.

 

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