En febrero de este año, le exigieron al J. M. de Los Ríos garantizar la vida, integridad y salud de los pacientes del servicio, sin embargo este hospital sigue sumando fallecidos, publica.

Ocho meses cumplieron ya las medidas cautelares dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), a los niños y niñas del servicio de Nefrología del hospital J. M. de Los Ríos. Y pese a esas recomendaciones, cuyo fin era garantizar la vida de los pacientes, su omisión y no aplicación sigue dejando saldos lamentables. Ya murió la tercera niña, Laura Araujo, de tan solo 14 meses, era la más chiquita de la unidad. El pasado 19 de octubre se confirmó su deceso. Tenía una infección urinaria que empeoró por su condición.

El 22 de octubre la enterraron, justo un día después que se cumplieran los ocho meses de las medidas de protección. Carlos Trapani, coordinador de Cecodap, en su cuenta de Twitter dijo que el Estado ha sido indolente, que no reconoce los problemas y no adopta las medidas necesarias para resguardar la vida y aliviar el sufrimiento de los niños.

La primera niña en morir fue Carina Vergara, de 16 años. Su fallecimiento ocurrió el pasado 14 de mayo producto de un derrame pleural y una endocarditis.

Un mes después murió Karla Romero, de 6 años. Ella estaba en terapia intermedia producto de una infección y tenía síndrome de Fanconi.

En 2017, 10 niños murieron en ese servicio, que tiene capacidad para 10 pacientes. Sin embargo, actualmente solo se atienden cinco, porque no hay suficiente personal. Se requieren seis residentes para poder atender los 10 cupos y los 20 cupos para la hemodiálisis, y solo hay dos especialistas e igual número de residentes.

El abogado Trapani, a principios de este mes, dijo que solicitaron a la CIDH extender las medidas cautelares a 14 servicios de las 34 especialidades de este centro de referencia nacional.

Las medidas serían para Cardiovascular, Hematología, Neumología, Medicina II y III, Anatomía Patológica, Consulta Externa, Triaje, Neurocirugía, Niño Sano-Pediatría, Medicina Adolescente, Nutrición y Neurología.

Lo hicieron por la falta de atención por parte del Estado en materia de dotación de medicinas e insumos y de mantenimiento de la infraestructura.

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